VALENTINA PINELO [O.A.R.]

CARTA DE INFORMACIÓN

OTROS NOMBRES

FECHAS

finales del s. XVI-1624/29

LUGAR

¿Sevilla/Génova?-¿Sevilla?

ESTADO

Monja profesa de la Orden de las Agustinas Recoletas en el convento de San Leandro de Sevilla.

DATOS BIOGRÁFICOS

Pocas son las fuentes disponibles para reconstruir el perfil biográfico de la autora. Valentina debió nacer en la segunda mitad del siglo XVII, probablemente en Sevilla. Procedía de una familia de comerciantes del linaje de los Pinelo, de origen genovés, que se trasladaron a Sevilla. Según las suposiciones de Teófilo Aparicio López, es probable que su madre fuera Francisca Francisquín. Los hombres de su familia desempeñaron cargos importantes en la jerarquía eclesiástica. Su hermano, Agustín Pinelo, llegó a ser canónigo de la catedral de Sevilla y Dominico Pinelo, su sobrino, cardenal de la Santa Iglesia de Roma y arcipreste de Santa María la Mayor. A este último le dedica Valentina su Libro de Santa Anna. No sabemos nada respecto a la niñez de la autora, a pesar de que antes de haber cumplido los cuatro años ingresó en el convento agustino de la ciudad, donde se crio, tomó el hábito y al parecer nunca salió de este. Su pertenencia a una familia acomodada, que tenía el patronato de la capilla del Pilar en la catedral y el hecho de crecer en Sevilla durante el auge del comercio transatlántico y cultural de la ciudad permite explicar su formación y su aceptación en uno de los conventos de mayor renombre del momento, el de San Leandro de Sevilla. La comunidad de las agustinas sevillanas era un ambiente especialmente propicio al desarrollo intelectual, artístico y literario de las religiosas y un centro neurálgico económico en la ciudad. Recordemos que a este mismo convento, en el siglo siguiente, estara considerarsegaullicar porque era de inter[]as. En todo caso NO  se puede poner ,  la terminologs. lo pones con cita literal, tán vinculadas escritoras como María Francisca de Zúñiga (de Ayamonte), Juana de Madariaga, hija de los marqueses de las Torres, y Leonor de Saavedra Maldonado. Valentina debió de aprender a leer y escribir en su primera juventud. Llegó a dominar un repertorio amplio de lecturas clásicas, las Sagradas Escrituras, la patrística, así como la lengua latina. Sabemos también que se interesó por el arte, encargando, en 1598, la construcción de un retablo para el altar, que llamó de san Agustín, para la iglesia del convento. Dentro de la comunidad desempeñó cargos diversos, siendo clavera (1596) y sacristana del monasterio (1598). Aunque a nosotros nos llegó solamente su Libro de las alabanças y excelencias de la gloriosa Santa Anna, por los paratextos que nos dejó la autora, sabemos que compuso también un Cancionero de rimas de circunstancias que estaba preparado para su publicación antes de 1601 y que probablemente circuló en forma manuscrita entre los literatos residentes en la Sevilla del momento. Con el Libro de Santa Anna, publicado en la misma ciudad por Clemente Hidalgo gracias a la intervención y el apoyo económico de su sobrino, Valentina intervino en uno de los debates teológicos más feroces de su tiempo sobre la Inmaculada Concepción, objeto de enconada disputa entre los maculistas e inmaculistas. El texto, de difícil clasificación, podría considerarse una hagiografía erudita de Santa Ana y una exégesis de las Sagradas Escrituras y de los Padres de la Iglesia, escrito en una prosa de carácter ascético. Es muy probable que Valentina pudiera opinar sobre un tema tan controvertido gracias a que gozaba ya de cierta autoridad intelectual en los círculos literarios sevillanos. Tenía fama de excelente poeta, de la que queda constancia en las alabanzas de autores como Lope de Vega, quien podría haberla conocido personalmente: la elogia en algunos sonetos y octavas incluidos en los preliminares al Libro de Santa Anna, la menciona en varias de sus obras teatrales (en el El hijo pródigo y el Peregrino en su patria) y la sitúa en el parnaso de las ilustres féminas, junto a autoras como Isabel de Esforcia, Olivia de Nantes, María Enríquez y Ana de Zuazo. En el mismo tono encomiástico se refirieron a ella Leonardo de Argensola, Diego de Zúñiga y, posteriormente, Nicolás Antonio, colocándola al final de su apéndice de autoras ilustres, Gynaecum Hispanae Minervae (1648: 372v), adjunto al Manual de la historia vulgar. . No poseemos más datos sobre los siguientes años de su vida. Se supone que gozó de reconocimiento y fama como poeta y mística hasta su muerte, en 1624 o 1629.

OBRAS

Libro de las Alabanças y Excelencias de la Gloriosa Santa Anna. Compuesto por Doña Valentina Pinelo, Monja professa en el Monasterio de San Leandro de Sevilla, de la orden de San Agustín. Dirigido al ilustrissimo y reverendísimo Señor Dominico Pinelo, Cardenal de la S. Iglesia de Roma, T.T. de San Lorenço en Paneperna, Archipreste de S. María la Mayor

Ms/publicación

Impreso antiguo, siglo XVII

Año

1601, Sevilla: por Clemente Hidalgo

Descripción

4º, 13 hs., s.n. de preliminares, 422 folios;

En la portada: escudo cardenalicio con dos figuras femeninas a dos lados; más abajo se encuentra  el corazón de San Agustín atravesado por una flecha, o sea, el escudo de armas del cardenal Dominico Pinelo, a quien va dedicado este libro. En el centro, en un óvalo dibujado, aparece un árbol con el texto: Sot dura cortecia dolce fructo — 1601. Con privilegio, Impreso en Sevilla, en casa de Clemente Hidalgo. Esta tasado, a blancas el pliego, s.n. de preliminares, 422 folios, con el índice de la S. Escritura y 1 hoja con erratas. Al final del índice, en forma de colofón: Impresso en Sevilla, en San Leandro, Convento de Monjas de nuestro Padre San Agustín, Por Clemente Hidalgo. Año de 1601.

Localización

Hay varias copias del impreso: Madrid, BNE, R/4464; Madrid: Monasterio de las Descalzas Reales, C/283; Madrid: Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, 22320; Granada: Biblioteca de los Padres Carmelitas Descalzos; Sevilla: Biblioteca Universitaria: Estante 71, número 86; Sevilla: Convento de San Leandro; Sevilla: Biblioteca Provincial, signaturas: 71-86 y 94-58.

Cancionero de los Santos de la Orden de San Agustín

Ms/publicación

Texto no localizado

Año

Escrito antes del 1601

Descripción

Localización

Notas

A este texto alude la autora en el prólogo al Libro de las Alabanças y Excelencias de la Gloriosa Santa Anna como Rimas. Lo describe como un conjunto de poemas compuestos para las fiestas en los que había trabajado durante varios años y a los que, al parecer, tenía mucho cariño aunque le costaron mucho esfuerzo. La investigadora Mª Carmen Marín Pina considera que el título del Cancionero se puede atribuir a Felix Ossinger, F. Joannes en la Bibliotheca Agustiniana, Historica, Critica et Chronologica in qua mille quadragenti Agustiniani Ordinis Scriptores, Inglostadii et Augustae Vindelicorum, 1768, pág. 696. También se conoce por el título Liber Carminum in omnia Ordinis Nostri Sanctorum ac Beatorum festa.

BIBLIOGRAFÍA

Documentos, manuscritos e impresos antiguos:

Anónimo, Censura al Libro de  Excelencias y Alabanzas  de  Santa Anna compuesto por Valentina Pinelo en San Leandro de Sevilla, British Library, Ms. Add. 20915, ff. 346-348.

Libro de cuentas del convento de San Leandro [1596] (1944), incluido en: Llordén, Andrés, “Notas acerca de la escritora y poetisa agustina Sor Valentina Pinelo”, La Ciudad de Dios, CLVIII, p. 80 [original en el Archivo del Convento de San Leandro de Sevilla].

Encargo de la autora para la realización de un retablo [19 de abril de 1598], incluido en: Llordén, Andrés, “Notas acerca de la escritora y poetisa agustina Sor Valentina Pinelo”, La Ciudad de Dios, CLVIII, pp. 67-97 [original documento en el Archivo de Protocolos en Sevilla].

Estudios modernos:

Aparicio López, Teófilo (2002), “Doña Valentina Pinelo. Poetisa y escritora mística”, en: Archivo Agustiniano, 86, 204, pp. 385-414.

Bengoechea, I. (1982), “Cristología y mariología en Valentina Pinelo, escritora del siglo XVII in Cristologías modernas y Mariología”, en: Estudios Marianos, Madrid, V. 47, pp. 269-287.

Lasso de la Vega, Ángel (1871), Historia y juicio crítico de la Escuela Poética Sevillana en los siglos XVI y XVII, Madrid: Imprenta de la Viuda e Hijos de Galiano, p. 305

Llorden, Andrés  (1944), “Notas acerca de la escritora y poetisa agustina Sor Valentina Pinelo”, separata de la Ciudad de Dios, CLVIII, ed. 3,  Real Monasterio de El Escorial, 34 pp., s.n..

Luna, Lola  (1993), “Las lectoras y la historia literaria”, en: La Voz de Silencio. II. Historia de las mujeres: compromiso y método, Cristina Segura (ed.),  Madrid: A. C. Al-Mudayna, pp. 75-96.

Luna, Lola (1989),  “Sor Valentina Pinelo, intérprete de las Escrituras”, en: Cuadernos hispanoamericanos, 464, pp. 91-104.

Luna, Lola (1992), “El sujeto femenino de la Historia literaria”, en: La Voz de Silencio. I. Fuentes directas para la historia de las mujeres (siglos VIII- XVIII), Cristina Segura (ed.), Madrid: A.C. Al-Mudayna, pp. 53-63.

Luna, Lola (1997), “Dos escritoras para la historia: Valentina Pinelo y Ana Caro”, en: Breve historia feminista de la literatura española (en lengua castellana). La literatura escrita por mujer: desde la Edad Media hasta el siglo XVIII), Iris María Zavala y Myriam Díaz Diocaretz (coords.) Barcelona: Anthropos, pp. 243-280.

Marín Pina, Mª Carmen (2006), “Cuantas fueren las cabeças tantos han de ser los pareceres: censura al ‘Libro de Santa Ana’ de Valentina Pinelo”, en: Voz y letra: Revista de literatura, 17, 2, pp. 33-50.

Santiago Vela, Gregorio de (1922), “Ensayo de una Biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín”, vol. VI, Madrid, pp. 320-321.

Serrano y Sanz, Manuel (1903-1905), Apuntes para  una biblioteca de escritoras españolas desde el año 1401 al 1833, t. II, Madrid: Sucesores de Rivadeneyra, p. 132.

TERESA DE JESÚS MARÍA [O.C.D.]

CARTA DE INFORMACIÓN

OTROS NOMBRES

María de Pineda de Zurita

María de Pineda

María Pineda de Zurita

FECHAS

1 de octubre de 1592- 9 de enero de 1641

LUGAR

Toledo-Cuerva, Toledo

ESTADO

Monja profesa de la Orden de las Carmelitas Descalzas de Cuerva

DATOS BIOGRÁFICOS

María de Pineda de Zurita fue hija de Juan de Pineda y Gabriela de Zurita, ambos de linaje noble, procedentes de Toledo. Nació el 1 de octubre de 1592, según los datos que nos dejó en su autobiografía. Excepto los documentos oficiales de la congregación y algunas noticias debidas a las religiosas de su orden, no se conocen otras fuentes que pudieran complementar su biografía. María debió de recibir una formación elemental en el ambiente doméstico. En la mencionada Vida dejó constancia de su vocación precoz y su inclinación hacia los libros, la mortificación corporal y el recogimiento espiritual. Todavía siendo niña se decidió por la vida religiosa; sin embargo, resulta difícil distinguir con claridad las informaciones dictadas por los modelos propios de la autobiografía espiritual de los acontecimientos factuales de su vida. Por su testimonio sabemos que quiso entrar en el claustro con tan solo nueve años y que superó satisfactoriamente un examen extraordinario sobre la doctrina para poder cumplir con este deseo. Su noviciado y posterior servicio en religión transcurrieron en el convento de las descalzas de Cuerva, fundado por doña Aldonza Niño de Guevara, esposa de Garcilaso de la Vega. María profesó los votos solemnes el 13 de mayo de 1609, como consta en el Libro de profesiones de la comunidad de Cuerva y se transcribe en el manuscrito sobre varias fundaciones descalzas, custodiado en la BNE. Al profesar, en un principio tomó el nombre de María del Cristo, para después cambiarlo a Teresa de Jesús María debido a la devoción que en su convento se tenía a la santa abulense, y esta, precisamente, ha sido la razón de la confusión que se produjo entre la Teresa de Jesús de Ávila y la de Toledo, lo que dificultó la atribución autoral de los textos de Teresa de Jesús María. Como religiosa, pronto ganó fama entre sus correligionarias por los dones espirituales y místicos y sus formas de piedad extremada; sin embargo, la resonancia de su santidad fue objeto de escrutinio por parte de la Inquisición, que examinó sus experiencias y testimonios en una asamblea especial convocada en Toledo (1609). Desde entonces, las denuncias de otras religiosas y la censura de sus subsiguientes padres espirituales fueron una constante. A los treinta y cuatro años fue elegida priora del convento (el 21 de noviembre de 1626), un cargo que repitió otra vez en 1630, tras las elecciones del 26 de julio. Es de suponer, por sus dos renuncias antes de cumplirse la cadencia, que no encontraba este puesto particularmente provechoso o cómodo. Esta incomodidad pudo tener su origen en su dedicación a la escritura y el tipo de textos que por entonces estaba componiendo, ya que prefería aquellos géneros literarios que suponían un mayor riesgo para una escritora e implicaban un mayor escrutinio censor. Además del relato de su vida, escrito por orden de su confesor, interrumpido en 1626 y retomado al cabo de diez años, compuso obras teológicas relativas a las grandes controversias de la época, como la cuestión del libre albedrío, el dogma de la Inmaculada Concepción de María o el tema del amor en el Cantar de los cantares y las exégesis de las Sagradas Escrituras, que se recogen en dos volúmenes. El primero, de 1636, cuenta con más de quinientas páginas, y el segundo, terminado en 1639, unas cuarenta, además de unos comentarios a las lamentaciones (trenos) de Jeremías. Igual que ocurre en otros casos de místicas extáticas, sus experiencias y dones espirituales se relacionaron con un débil estado de salud y múltiples enfermedades de carácter supuestamente mortal que sufrió a lo largo de su vida. Además de las fuertes migrañas y los ataques artríticos en la mitad de su vida, alrededor de 1626, María sufrió un cáncer de pecho que fue milagrosamente curado por los rezos de una de las hermanas monjas, Francisca de la Merced de Dios. Todas estas experiencias condicionaron su relación con el mundo, con su propio cuerpo y, por supuesto, con la escritura, cuya originalidad, estilo y profundidad permaneció en un olvido casi absoluto hasta nuestros días (la primera y única edición es de Manuel Serrano y Sanz, de 1921). 
De entre la documentación generosamente nos facilitada por la comunidad descalza de Cuerva son el Libro de Profesiones, la Crónica de la Orden junto con la correspondencia y otros documentos se pudo comprobar, entre otras cosas, la fecha de la muerte de la autora que fue el 9 de enero de 1641 y no, como sostuvo en su momento el editor de su obra Manuel Serrano y Sanz, a inicios del 1642. También, como se pudo inferir de la carta autógrafa de tal Manuela de la Madre de Dios y el Libro de la Fundación, el valor y peso de los textos doctrinales de Teresa han sido reconocidos por sus hermanas de la comunidad que activamente presionaron las autoridades para su publicación contribuyendo a consolidar su imagen en tanto autora y teóloga mística entre los círculos carmelitanos:

Tocante a lo que pide de nuestra venerable madre Teresa de Jesús María que ha poco murió, las religiosas darán sus dichos jurados y yo enviaré a vuestra reverencia un traslado de su vida, que escribió por obediencia; hay grandiosos papeles de cosas altísimas, que piden libro de por sí andando en tiempo.” Madre Manuela de Dios al prelado de Cuerva, octubre 1642  (BNE MSS/18668/41)

A modo de apostilla, se advierte que el mismo nombre de religión fue elegido por doña Teresa Capata, hija de don Gerónimo Walther Capata y doña Francisca Velásquez. La documentación relativa a esta religiosa, que murió el 1642, el 8 de agosto, se encuentra en la Bibliothèque Royale de Belgique Albert 1er, Ms. 14 148. Por una falsa atribución, se menciona a Teresa de Jesús María (María de Pineda) como la protagonista de la biografía en Vidas de algunas venerables religiosas que resplandecieron en virtud y santidad en el convento de nuestro Padre San José de Carmelitas Descalzas de Ávila (Manuscrito, Archivo Histórico Nacional, Papeles Carmelitas).

OBRAS

Tratado de una breve relación de su vida que cuenta una monja descalça

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Incluido en:

Teresa de Jesús María, Autobiografía y relación de las mercedes divinas recibidas e ilustraciones místicas [Manuscrito]

Está disponible en: Biblioteca Nacional Española, Biblioteca Digital Hispánica,  website (consultado: 20/08/15): <http://bdh-rd.bne.es/viewer.vm?id=0000145888&page=1>

Edición moderna:

Serrano y Sanz, Miguel (1921), Las obras de las sublime escritora del amor divino Sor Teresa de Jesús María Carmelita Descalza del siglo XVII trasladadas de sus manuscritos originales y por primera vez impresas con estudio crítico, Madrid: Gil Blas, pp. 1-32.

Año

1624-1636 [interrumpidos]

Descripción

8º, 63 pp., 574 ff.

1-64

Localización

Madrid, BNE, Ms. 8482

Comentarios sobre varios pasajes de la Sagrada Escritura

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Incluido en:

Teresa de Jesús María, Autobiografía y relación de las mercedes divinas recibidas e ilustraciones místicas [Manuscrito]

Está disponible en: Biblioteca Nacional Española, Biblioteca Digital Hispánica,  website (consultado: 20/08/15): <http://bdh-rd.bne.es/viewer.vm?id=0000145888&page=1>

Edición moderna:

Serrano y Sanz, Miguel (1921), Las obras de las sublime escritora del amor divino Sor Teresa de Jesús María Carmelita Descalza del siglo XVII trasladadas de sus manuscritos originales y por primera vez impresas con estudio crítico, Madrid: Gil Blas, pp. 1-32.

Año

1624-1636 [interrumpidos]

Descripción

8º, 511 pp., 574 ff.

64-574

Localización

Madrid, BNE, Ms. 8482

Explicación de lo místico de los Trenos de Jeremías

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Está disponible en: Biblioteca Nacional Española, Biblioteca Digital Hispánica,  website (consultado: 20/08/15): <http://bdh-rd.bne.es/viewer.vm?id=0000145823&page=1>

Año

ca. 1636

Descripción

8º, 55 hs.

ff. 1-55

hoja 55 en blanco, h.10 parte de texto tapado a modo de corrección

Localización

Madrid, BNE, Ms. 8476

Notas

Texto en español y latín.

Segundos - comentarios sobre pasajes de la Sagrada Escritura

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Está disponible en: Biblioteca Nacional Española, Biblioteca Digital Hispánica,  website (consultado: 20/08/15): <http://bdh-rd.bne.es/viewer.vm?id=0000145823&page=1>

Año

ca. 1636

Descripción

8º, 37 pp., 92 hs.

  1. 56-92v [incompleto]

Localización

Madrid, BNE, Ms. 8476

Notas

texto en español y latín.

BIBLIOGRAFÍA

Documentos, manuscritos e impresos antiguos:

Carta de la M.e Manuela de la Madre de Dios, [fechada en Cuerva a 3 de Octubre de 1642], Madrid, BNE, Ms. 18668/41.

[Relación de sus enfermedades], Archivo de las Descalzas Reales de Cuerva [copia manuscrita en el archivo privado de Manuel Serrano y Sanz].

Estudios modernos:

Serrano y Sanz, Manuel (1893), “Estudio crítico sobre la vida y escritos de la religiosa carmelita, Sor Teresa de Jesús María”, Revista Contemporánea, 30 de marzo, pp. 573-590.

Serrano y Sanz, Miguel (1921), Las obras de las sublime escritora del amor divino Sor Teresa de Jesús María Carmelita Descalza del siglo XVII trasladadas de sus manuscritos originales y por primera vez impresas con estudio crítico, Madrid: Gil Blas.

Serrano y Sanz, Manuel (ed.) (1903-1905), Apuntes para una biblioteca de escritoras españolas desde el año 1401 a 1833, V.1, Madrid: RAE, pp. 602-608.

“La ficha de Teresa de Jesús María se ha preparado dentro del proyecto de investigación “The Mother Tongue: Textuality, Authority and Community in the post-Teresian Female Monasticism (ca. 1560 -1700)” (2020/39/D/HS2/00902) financiado por National Science Centre en Polonia, PI dr Julia Lewandowska, Universidad de Varsovia. Los datos proporcionados derivan de las fuentes primarias consultadas en el Archivo de las Carmelitas Descalzas de la Encarnación, Cuerva (Toledo) y la Biblioteca Nacional Española.”

MARIANA DE SAN JOSÉ [O.A.R.]

CARTA DE INFORMACIÓN

OTROS NOMBRES

Mariana Manzanedo

María Ana Manzanedo

FECHAS       

5 de agosto de 1568-15 de abril de 1638

LUGAR        

Alba de Tormes, Salamanca-Madrid

ESTADO

Monja profesa de la Orden Recoleta de San Agustín, convento de las Agustinas Recoletas en Éibar (1603), Medina del Campo (1604), Valladolid (1606-1610), Palencia (1610), Madrid (Monasterio de Santa Isabel, 1611-1612, y Monasterio de la Encarnación, 1612-1638).

DATOS BIOGRÁFICOS

Mariana Manzanedo nació el 5 de agosto de 1568 en Alba de Tormes, en una familia noble que mantenía relaciones cercanas con los círculos cortesanos. Su padre, Juan de Manzanedo de Herrera, era abogado, licenciado de la Universidad de Salamanca, y perteneció al círculo de consejeros de Fernando Álvarez de Toledo (1507-1582), duque de Alba. Su madre, treinta y seis años menor que su marido, María Maldonado y Camargo, procedía de Coria (Cáceres), donde vivía en el claustro de clarisas en condición de educanda. El matrimonio tuvo siete hijos, de los cuales la menor era Mariana, que quedó huérfana de madre diez días después de su nacimiento. Después de este acontecimiento el padre se marchó a Roma, de donde volvió, ya en condición de sacerdote, para honrar la memoria de su difunta esposa. En la casa natal Mariana aprendió a leer y probablemente a escribir. También se sabe que a la edad de cuatro años fue llevada a la iglesia de Alba de Tormes, donde recibió de manos de Teresa de Jesús una bendición personal. Por su relación autobiográfica sabemos que durante su infancia vivió un intento de violación por parte de uno de los criados de la casa. En 1574 Juan de Manzanedo decidió mudarse a Ciudad Rodrigo junto con sus hijos menores. Sin embargo, al año siguiente murió y los familiares de Mariana la hicieron ingresar, sin su consentimiento, en el convento de Santa Cruz de dicha ciudad, donde estaban dos tías suyas y su hermana mayor, Francisca. Las otras hermanas, María y Catalina, entraron en el convento de la tercera Orden Franciscana, en Coria. En el convento de Ciudad Rodrigo Mariana Manzanedo vivió, como anteriormente su madre, en condición de educanda y permaneció en este claustro los siguientes veinticinco años de su vida. Allí recibió educación en letras y formación espiritual, llegando a conocer las principales lecturas religiosas del momento, entre las cuales la vida de santa Catalina de Siena y los libros de fray Luis de Granada y Pedro de Alcántara eran sus preferidas. En su testimonio dejó claro que los primeros años de la vida claustral le resultaron muy difíciles y desagradables, ya que fue un periodo de enfermedades graves y conflictos con su hermana y las otras religiosas. Asimismo, durante esos años sentía preferencia  por el casamiento y la vida seglar que por la vocación religiosa. Parece que las lecturas piadosas despertaron en la joven los anhelos espirituales y el deseo de hacerse monja siguiendo el ejemplo de su hermana mayor, quien tomó el hábito en 1579. En 1581 Mariana tuvo su primera experiencia mística, con la visión del último juicio, que marcó significativamente toda su posterior trayectoria religiosa. Durante los siguientes años, Mariana vivió en constante lucha entre la vida espiritual y el mundo secular, ya que se sintió especialmente atraída por los libros de caballerías e hizo de escriba de tarjetas amorosas para otras mujeres del convento. De hecho, viviendo un conflicto interior entre los valores seculares y espirituales, sintió especial devoción por santos conocidos por su pasado pecador, como san Pablo o santa Magdalena. Finalmente, a los dieciocho años, después de haber encontrado patrocinio para el pago de la dote, profesó los votos solemnes, entrando en religión el 15 de febrero de 1587. A partir de este momento, Mariana se hizo devota de la espiritualidad teresiana. Asimiló los principales conceptos espirituales e hizo de Camino de perfección, que supuestamente conocía de memoria, un modelo para su futuro desarrollo religioso. También le eran familiares otros escritos de la Santa: los Avisos, las Moradas y la Vida, que le entregó, autógrafos, la propia autora antes de su muerte. Durante su vida en el convento de Ciudad Rodrigo desempeñó las funciones de sacristana, tornera, maestra de novicias y, repetidas veces, priora. Fuese cual fuese el cargo ocupado, Mariana se veía atraída por las relaciones amorosas seculares y platónicas, por esa razón mantenía correspondencias afectuosas con varios hombres y recibía visitas de algunos pretendientes en el locutorio del claustro, sucesos de los que ella misma deja testimonio en su Vida. Su gobierno como priora (1599-1602) se caracterizó por una disciplina especialmente severa y dio comienzo al plan de reforma recoleta de la regla agustina. Al acabar su priorato en Ciudad Rodrigo, fue elegida para fundar en Éibar, hacia donde partió con otra monja de su comunidad, Leonor de Miranda. La fundación en Éibar constituye el inicio de un gran proyecto de retorno a las formas primitivas de la regla de san Agustín, llevada a cabo con el apoyo del padre Agustín Antolínez. Mariana, junto con otras monjas elegidas para esta empresa (dos del convento de Santa Úrsula de Toledo, dos de Salamanca y una de Ávila), y como priora de la nueva comunidad, profesó según las nuevas Constituciones el 23 de mayo de 1604. Este mismo mes fue elegida, con otra compañera suya, Leonor de Miranda (de la Encarnación), para otra fundación en Medina del Campo. Esta resultó ser la más problemática, debido a conflictos de intereses entre los fundadores seculares (Baltasar Gilimón y Agustina Canovio) y varias crisis económicas que la comunidad tuvo que afrontar después de la inundación del edificio. Sus siguientes fundaciones fueron en Valladolid (1606-1610), Palencia (1610) y Madrid (monasterio de Santa Isabel, 1611-1612, y monasterio de la Encarnación, 1612-1638). Intervino, apoyó e influyó directa e indirectamente también en otras fundaciones de la orden (Villafranca del Bierzo, 1623; Castilla de la Cuesta [Sevilla], 1625; Carmona, 1629; Requena, ca. 1630; Medellín [Cáceres], 1631; Pamplona, 1634, y Lucena, después de su muerte, en 1639, pero siguiendo su plan). Sin duda su proyecto más importante fue la fundación del monasterio de la Encarnación de Madrid bajo los auspicios de la reina Margarita de Austria, quien entabló con Mariana una relación de amistad, mecenazgo y mutua inspiración. Durante la construcción del nuevo edificio, las cuatro monjas venidas para establecer la comunidad vivieron, con el consentimiento de Felipe III, en la Casa del Tesoro, al lado del palacio, por lo que ambas mujeres podían visitarse a diario. La interrupción de la amistad por la muerte posparto de la reina no paralizó el proyecto, que fue llevado a cabo en los años siguientes bajo la supervisión personal del rey. Estas relaciones cercanas entre Mariana, como priora del convento, y la corte fueron objeto de severas críticas en los círculos aristocráticos y cortesanos, llegando a imprimirse doscientas copias de un panfleto que fueron difundidas entre la élite madrileña. A pesar de esta conflictiva relación, la comunidad mantuvo cercanía con las políticas del Reino de los siguientes monarcas. En 1625 Felipe IV completó las escrituras de la fundación, iniciadas ya por Felipe III. Asimismo, las religiosas asumieron nuevas Constituciones, escritas y puestas en práctica por la propia Mariana. Estas estipulaciones fueron aprobadas por el papa Pablo IV en 1616 y el papa Urbano VIII extendió su uso a todas las comunidades agustinas recoletas a partir de 1625. El periodo del priorato madrileño fue especialmente relevante para la producción literaria de Mariana. En estos años escribió sus Comentarios al Cantar de los cantares y los Ejercicios espirituales y repartimientos de todas las horas. Además de una correspondencia abundante, compuso otros textos breves, como Consejos y máximas, Jaculatorias, Oraciones y prácticas piadosas, Apuntamientos, Poesías, Advertencias para la reformación religiosa, Versículos y Testamento espiritual. En los últimos años Mariana padeció graves enfermedades. Se dice que diez años antes de su muerte perdió toda su dentadura y estuvo tan enferma del estómago que casi no comía, manteniéndose, según los testimonios, gracias al Santísimo Sacramento. A pesar de esto, permaneció activa intelectualmente hasta los últimos días de su vida. Murió de tifus exantemático cuando estaba a punto de cumplir los setenta años, el 15 de abril de 1638. Después de su muerte, Spínola realizó dos retratos suyos, que fueron colocados en su celda y en la silla de priora del convento, respectivamente. Catalina de la Encarnación, una religiosa de su comunidad, guardó sus autógrafos durante más de diez años y después los sacó a la luz, a pesar de que Mariana había dado orden de quemarlos. También se dispuso a hacer un informe sobre la vida y las virtudes de Mariana de San José, al que respondieron cuarenta religiosas. En 1642 Luis Muñoz recogió estos testimonios y los autógrafos de la autora y en 1645 publicó su biografía. Mariana de San José es venerada como sierva de Dios dentro de la Iglesia católica. Su proceso de beatificación fue paralizado debido a complicaciones de índole política.

OBRAS

Epistolario

Ms/publicación

Manuscritos, siglo XVII

Se publicaron algunas cartas en tomos colectivos:

Alonso, Carlos (1988), “Cartas de la Madre Mariana de San José y otras prioras del Monasterio de la Encarnación de Madrid a los Barberini”, Recollectio, XI, pp. 565-594.

Archivo Histórico Hispano-Agustiniano y boletín oficial de la provincia del Smo. Nombre de Jesús de Filipinas, 16 [información sobre las 26 cartas a María Bautista de San Agustín, hoy perdidas].

Año

1606-1637

Descripción

Localización

Las cartas están dispersas por varios archivos en España y Europa: Archivo del Monasterio de la Encarnación de Madrid; Pamplona, Archivo de las Agustinas Recoletas; Florencia, Archivio di Stato di Firenze. Mediceo del Principato. En Archivo de la Encarnación, Colección de cartas autógrafas de la Madre Mariana de San José, legajo 65 [mecanografiadas en Escritos íntimos, 1981].

Notas

Mariana mantuvo una correspondencia copiosa con los círculos aristocráticos, eclesiásticos y de gobierno más importantes de su tiempo. Entre sus corresponsales destacan: el papa Urbano VIII; el rey Felipe IV; el Conde Duque de Olivares; Anna Colonna; Luisa de Carvajal y Mendoza (tres cartas); el cardenal Francesco Barberini; Alonso Pérez de Guzmán, Patriarca de las Indias; Juan de Ciriza, marqués de Montejaso, secretario de Felipe III; Inés de Zúñiga y Velasco, condesa de Olivares; María de Zúñiga, condesa de Miranda; Aldonza de Zúñiga (del Santísimo Sacramento); Magdalena de Austria, gran duquesa de Toscana.

Vida - La Vida de N.M. fundadora la madre Mariana de San José escrita por su mano…

Ms/publicación

Manuscrito, siglo XVII

Publicada post mortem por Luis Muñoz:

Vida de la venerable Madre Mariana de s. Joseph, fundadora de la Recolección de monjas agustinas, priora del Real convento de la Encarnación. Hallada en unos papeles escritos de su mano. Sus virtudes observadas por sus hijas dedicadas al Rey nuestro Señor. Publicadas por orden de las mismas religiosas. El licenciado Luis Muñoz. Madrid, 1645 [con licencia del ordinario, don Francisco Zapata y Mendoza. Aprobación del doctor don Pedro de Ávalos, Colegial mayor. Aprobación de fray Francisco de Arvajo, Calificador del Consejo de la Santa Inquisición].

Año

1611

Descripción

554 ff.

Localización

Madrid, Archivo del Monasterio de la Encarnación, legajo 71

Notas

Otros ejemplares, con significativas divergencias en la reproducción del texto:

La vida de N. M. Fundadora la Madre Mariana de san Josseph. Escrita por su mano en 16 quadernos que fueron los que pudieron hallarse o recogerse en el estado que tienen aquí las aprovaciones y licencias para la impresion de este libro que ordeno según los mismos quadernos y otros documentos el lic.do Luis Muñoz [1608 – 1620, 204 hs.; 16 cuadernillos. Autógrafo con correcciones. Incompleto; Madrid, Monasterio de la Encarnación, Legajo 62].

Constituciones primitivas de la Madre Mariana de San José, aprobadas por el Papa Pablo V

Ms/publicación

Manuscrito, siglo XVII

Año

1619 [1600-1638]

Descripción

7 ff. + 35 ff.

Localización

Madrid, Archivo del Monasterio de la Encarnación, Legajo 74

Notas

Texto en latín

Colección de cuentas de conciencia desde el año 1605 hasta el año 1622

Ms/publicación          

Manuscrito, siglo XVII

Año    

1605-1622

Descripción

2 ff.+ 155 ff.

Notas 

Hológrafo. Son 27 escritos independientes, 20 de ellos están fechados. Isabel Barbeito Carneiro las considera un diario espiritual.

Localización  

Madrid, Archivo del Monasterio de la Encarnación, Legajo 62 [Se recogen en los Escritos místicos y autobiográficos editados por Teodoro Calvo]

Discursos sobre algunos capítulos del libro de los Cantares de Salomón, escritos por la venerable M. Mariana de S. Joseph, fundadora de la recolección de las Monjas Recoletas Agustinas, y Priora del Real Convento de la Encarnación

Ms/publicación          

Manuscrito, siglo XVII

Año    

ca. 1628

Descripción

4 ff + 149 ff., 4º

Notas

El texto es la copia sacada del original destruido por el padre Jerónimo Pérez quien ordenó a Mariana a escribirlo. Se recoge en los Escritos místicos y autobiográficos (sobre la Madre Mariana de San José), editados por Teodoro Calvo, t. III.

Localización

Madrid, Archivo del Monasterio de la Encarnación, Legajo 69

Advertencias sobre clausura y régimen conventual que la Madre Mariana de San José dio a un prelado que las pidió

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Año

s. a.

Descripción

4 ff., 4ª

Localización

Madrid, Archivo del Convento de la Encarnación, legajo 64

Notas

En una nota marginal se especifica el origen del escrito: “Papel de advertencias, que pidió un prelado se le diesen para reformación de sus monjas; en religión muy grave y él santo y de grandes partes y nombres”. Se incluye en la edición de Teodoro Calvo, en t. II.

Consejos y máximas

Ms/publicación

manuscritos autógrafos, siglo XVII

Año

1616; 1618 y sin fecha

Descripción

82 ff.

Localización

Madrid, Archivo del Convento de la Encarnación, legajo 66

Notas

La nota marginal explica: “Diferentes papeles de devoción, jaculatorias y oraciones, escritos los más de letra de N. Venerable Madre Fundadora; y hay algunos versos sagrados”. Se incluye en la edición de Teodoro Calvo, en t. II.

Oraciones, jaculatorias y advertencias

Ms/publicación

Manuscritos autógrafos, siglo XVII

Impresos, siglo XVII

Año

s. a.

Descripción

66 ff.

Localización

Madrid, Archivo del Convento de la Encarnación, legajo 67

Notas

Los textos no tienen una autoridad confirmada. Es una colección de autógrafos, manuscritos e impresos. Textos en verso y prosa, en latín y español. Se incluye en la edición de Teodoro Calvo, en t. II.

Testamento espiritual

Ms/publicación

Manuscrito autógrafo, siglo XVII

Año

ca. 1638

Descripción

Hológrafo, 9ff., 4º

Localización

Madrid, Archivo del Convento de la Encarnación, legajo 68

Notas

El texto está pensado como un tratado sobre la herencia espiritual y doctrinal de la Fundadora de Agustinas recoletas. Contiene las principales ideas de su doctrina y el proyecto de la reforma. El título de la portada: Papel de N.V. Fundadora a sus hijas las Religiosas de este Real Convento, el cual parece escribió en los últimos tiempos de su vida o cerca de su fallecimiento.

Exercicios espirituales, repartimiento de todas las horas. De sor Mariana de S. Ioseph, Priora del Convento Real de la encarnación, de la Orden de San Agustin

Ms/publicación

Impreso, siglo XVII

Año

1627, Madrid: por Viuda de Alonso Martín

Descripción

159 ff., 8º

Localización

Madrid, Archivo del Monasterio de la Encarnación

Notas

Poesías místicas

Ms/publicación

Manuscritos autógrafos, siglo XVII

Impresos, siglo XVII

Incluidas en: Oraciones, jaculatorias y advertencias

Edición moderna:

Eguiarte Bendímez, Enrique A. (2004), “Tan dentro del mismo centro. La poética espiritual de la Madre Mariana de San José”, Mayéutica, 69, pp. 5-96.

Año

s. a.

Descripción

66 ff.

Localización

Madrid, Archivo del Convento de la Encarnación, legajo 67

BIBLIOGRAFÍA

Documentos, manuscritos e impresos antiguos:

Aldonza del Santísimo Sacramento, Memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s. n., [ca. 1640], Madrid, Monasterio de la Encarnación.

Antonia de San José, Primer memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s. n., 1639, Madrid, Monasterio de la Encarnación [dos versiones del texto del 6 y 18 de diciembre del mismo año].

Catalina de la Encarnación, Memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s. n., [ca.1640], Madrid, Monasterio de la Encarnación.

Francisca de los Reyes, Memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s. n., [ca. 1640], Madrid, Monasterio de la Encarnación.

Isabel de la Cruz, Memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s.n., ca. 1640, Madrid, Monasterio de la Encarnación [dos versiones del texto y un memorial de una h.].

Magdalena de Cristo, Memorial biográfico sobre la Madre Mariana de San José, ms. s. n., [ca. 1640], Madrid, Monasterio de la Encarnación.

Estudios modernos:

Mariana de San José (2014), Madre Mariana de San José: obras completas, Jesús Díez (ed.), Biblioteca de Autores Cristianos.

Mariana de San José (1981), Testimonios (sobre la Madre Mariana de San José), Teodoro Calvo (ed.), 2 vols., Madrid: Archivo del Convento de la Encarnación.

Mariana de San José (1981), Escritos íntimos, Teodoro Calvo (ed.), 2 vols., Madrid: Archivo del Convento de la Encarnación.

Mariana de San José (1981), Escritos místicos y biográficos, Teodoro Calvo (ed.), 2 vols., Madrid: Archivo del Convento de la Encarnación.

Mariana de San José (1981), Escritos impresos, Teodoro Calvo (ed.), V. 1, Madrid: Archivo del Convento de la Encarnación.

Barbeito Carneiro, Isabel (1987), “Etopeya de la Madre Mariana de San José, una mujer carismática”, Recollectio, 10, pp. 45-95.

Barbeito Carneiro, María Isabel (2007), Mujeres y literatura de los Siglos de Oro. Espacios profanos y espacios conventuales, Madrid: Akal, pp. 315-327.

Panedas, Pablo (1978), “Dinamismo de la vida espiritual, según la doctrina de la madre Mariana de San José”, Recollectio, 1, pp. 56-113.

Díez, Jesús (1996), Mariana de San José. Fundadora de las Agustinas Recoletas, Madrid: Federación de Agustinas Recoletas.

MARÍA DE SANTO DOMINGO [O.D.]

CARTA DE INFORMACIÓN

OTROS NOMBRES 

La Beata de Piedrahita

FECHAS       

1485- ca. 1524

LUGAR

Aldeanueva de Santa Cruz, Ávila-¿?

ESTADO

Religiosa terciaria, Orden de Santo Domingo, convento de Santo Domingo de Piedrahita, convento de Santa Catalina y convento de Santo Tomás, todos de Ávila.

DATOS BIOGRÁFICOS

Muy pocos son los datos conocidos acerca de esta religiosa. Ni siquiera se pudo constatar su nombre secular y la fecha de su nacimiento. Se estima que debió de haber nacido entre 1475 y 1485 en la villa de Aldeanueva, en la provincia de Ávila, que por entonces se encontraba bajo la jurisdicción de los duques de Alba. De la misma diócesis proceden Ana de San Bartolomé y Mari Díaz. Probablemente María pertenecía a una familia piadosa, de origen campesino, y fue casi o completamente iletrada. Su obra literaria fue dictada y transcrita por un/a escriba. Desde su primera juventud se relacionó con los dominicanos del monasterio de Santo Domingo de Piedrahita. Alrededor de 1502 entró en el beaterio adjunto a la orden, donde vivió como terciaria algunos años y, posteriormente, se mudó al beaterio de Santa Catalina en Ávila, donde permaneció otros cuatro años. Gracias a su personalidad fuerte y decidida, María pronto encaminó sus pasos para mejorar su posición social. Sus siguientes años de vida resultan tan controvertidos como enigmáticos, ya que los testimonios conservados proceden de su cuarto, y último, juicio inquisitorial y recogen las opiniones de sus protectores y detractores (entre ellos, Juan Hurtado de Mendoza, Antonio de la Peña, su confesor, y Diego de San Pedro, su patrocinador). Probablemente debido a conflictos internos en la comunidad de Santa Catalina, la joven decidió mudarse a la residencia adjunta al monasterio dominico de Santo Tomás, en Ávila. Su reconocimiento como visionaria y mística iba creciendo en los círculos de la ciudad, llegando a Toledo y Burgos. Acompañada por beatas y frailes, que se consideraban seguidores suyos, empezó a desempeñar funciones de consejera y profetisa para las élites de estas ciudades. Al mismo tiempo, su ascetismo extremo, la total devoción hacia la Inquisición y las críticas a los conversos causaron agitaciones entre los habitantes de la ciudad y una reprimenda pública del obispo. Estas controvertidas opiniones no impidieron que su fama llegase a la corte de Fernando de Aragón y su círculo, incluyendo el cardenal Cisneros. El asombro generalizado por su fuerte personalidad y sus dones espirituales le valieron a María un puesto de consejera espiritual del rey. Al mismo tiempo, su devoción por la vida austera y recogida suscitó inquietudes entre los jerarcas de la Orden Dominica, siendo el general de la Orden de los Predicadores, Tomás Cayetano, su mayor detractor. Tras una serie de asambleas especiales convocadas por este, se recibió un permiso papal para investigar detalladamente a la profetisa, su doctrina y sus escritos. María compareció ante el tribunal cuatro veces, entre 1508 y 1510. Solamente se conservan los testimonios del último y decisivo juicio, que la absolvió de todas las acusaciones, sentenciando la ortodoxia de su pensamiento y sus palabras. Fue elegida priora del convento de Santa Cruz de María Magdalena, en su villa natal, Aldeanueva, fundado en su honor por el duque de Alba. Por la crónica conservada de ese convento, se sabe que permaneció allí hasta su muerte, alrededor de 1524.

OBRAS

Oración y contemplación de la muy devota religiosa y gran sierva de Dios soror María de Sancto Domingo de su orden y hábito, dirigida al muy reverendíssimo señor Cardenal y Obispo de Tortosa nuestro padre y general inquisidor y mi señor

Ms/publicación

Impreso, siglo XVI

Edición facsímil:

Manuel Blecua, José (ed.) (1948), Oración y contemplación de la muy devota religiosa y gran sierva de Dios soror María de Sancto Domingo […], Madrid: Hauser y Menet.

Edición digitalizada en: Bieses: Bibliografía de escritoras españolas, base de datos en línea (consulta: 10/08/2015): http://www2.uned.es/bieses/libros-pdf/M-Sto_Dom.pdf.

Año    

s. a. [1518?]

Descripción    

28 hs.; 4º

s. l. [Zaragoza]: s. n. [Jorge Coci]

Localización

Zaragoza, Universidad de Zaragoza, A. 60/ 41

Notas

Revelaciones

Ms/publicación

Manuscrito, siglo XVI

Edición moderna:

Sanmartín Bastida, Rebeca y María Luengo Balbás (eds.) (2014), Las Revelaciones de María de Santo Domingo, Queen Mary: University of London.

Año

ca. 1512

Descripción

[13], 317 hs.

Manuscrito copiado por varias manos

Localización

Sevilla, Biblioteca Colombina, códice 57-3-21, ff. 246r-258v

Notas

El texto va precedido por dos cartas de Catalina de Siena a don Jaime monje de la Cartuja copiadas por la misma mano que el resto de la obra. Rebeca Sanmartín Bastida aventura que fuesen transcritas por alguien del entorno de P. Antonio de la Peña por ser él el promotor de la traducción al castellano y la publicación de las cartas de la mística italiana. El volumen contiene textos en latín y español. Otro volumen parcial de este texto, intitulado Extractos de las revelaciones de Sor María de Santo Domingo, se encuentran en la Biblioteca Colombina, Códice 83-3-16, nº. 82-2, ff. 246r-358r.

Epistolario

Ms/publicación

Manuscritos, siglos XVI

Año

Desde 1510

Descripción

Localización

El epistolario se encuentra en los siguientes archivos:

Madrid, Archivo Histórico Nacional, Sección Universidades, Códice 1224 F, fol. 47; Madrid, Real Academia de Historia, Colección Salazar L-8, fol. 120; Madrid, Biblioteca de la Facultad de Derecho de Madrid, papeles de Cisneros, tomo 73. fol. 47 [Carta al Arzobispo D. Francisco Jiménez de Cisneros].

Notas

La carta a F.J. de Cisneros la transcribe Serrano y Sanz, cf. bibliografía. También han sido publicadas por Beltrán, cf. bibliografía.

BIBLIOGRAFÍA

Bilinkoff, Jodie (1992), “Spanish Prophetess and Her Patrons: The Case of Maria de Santo Domingo”, The Sixteenth Century Journal, 23, 1, pp. 21-34.

Bilinkoff, Jodie (1996), “Charisma and Controversy: The Case of María de Santo Domingo”, en: Spanish Women in the Golden Age. Images and Realities, Sánchez, Magdalena S. y Alain Saint-Saëns (eds.), Westport: Greenwood Press, pp. 23-35.

Giles, Mary E. (1990), The Book of Prayer of Sor Maria of Santo Domingo: A Study and Translation, New York: State University of New York Press.

Sanmartín Bastida, Rebeca (2013), “La construcción de la santidad en María de Santo Domingo: la imitación de Catalina de Siena”, Ciencia Tomista, 140, pp. 141-159.

Sastre Varas, Lázaro (1990), “Proceso de la Beata de Piedrahíta”, Archivo Dominicano XI, pp. 359-401 [se transcriben los papeles del tercer y cuarto juicios de María de Santo Domingo].

Sastre Varas, Lázaro (1991), “Proceso de la Beata de Piedrahíta (II)”, Archivo Dominicano XII, pp. 337-386 [se transcriben los papeles del tercer y cuarto juicios de María de Santo Domingo].

Serrano y Sanz, Manuel (ed.) (1903-1905), Apuntes para una biblioteca de escritoras españolas desde el año 1401 a 1833, Apéndice, Madrid: RAE, pp. 669-670.

MARÍA DE SANTA ISABEL [O.S.J.]

CARTA DE INFORMACIÓN

OTROS NOMBRES

Marcia Belisarda

María Fernández López

[en muchos estudios anteriores, erróneamente referida como María de Catalina de Santa Isabel de Melida Rosalinda]

FECHAS

1600-después de 1646

LUGAR

Ajofrín, Toledo-Toledo

ESTADO

Monja profesa de la Orden de las Comendadoras de Santiago de Toledo.

DATOS BIOGRÁFICOS

Muy pocos son los datos accesibles acerca de esta autora religiosa. Se sabe que nació en la villa de Ajofrín a principios del siglo xvii, en una familia de cristianos viejos perteneciente a la burguesía acomodada. La más reciente investigación archivística de Martina Vinatea Recoba (2015) ofrece datos reveladores y desmiente la tesis, mantenida desde la publicación de Serrano y Sanz (1903-1905), de que la autora perteneció a la comunidad de la Inmaculada Concepción de Toledo. Por lo que revela ese estudio, el seudónimo de Marcia Belisarda perteneció a María Fernández López, hija de Marcos Fernández e Isabel López. Según la investigadora, María ingresó en la congregación de las comendadoras de Santiago en el convento de Santa Fe, que por entonces compartía el edificio del palacio de Galiana con la comunidad de las concepcionistas franciscanas. Con gran probabilidad fue este hecho, junto con encontrarse ante tres poemas de la monja dedicados a la fundadora de las concepcionistas, Beatriz de Silva, el que había desviado a la crítica en sus hipótesis biográficas sobre la autora. Asimismo, el estudio de Vinatea Recoba reconoce que, aparte de su creación poética, Marcia Belisarda fue también autora de una biografía de María Bautista, una hermana de su comunidad. El estudio de los manuscritos llevó a considerar que María de Santa Isabel debió de obtener una formación esmerada en letras ya en su primera juventud. Su legado lírico abarca unas ciento treinta y ocho composiciones, y parece que el manuscrito fue preparado para su publicación, a juzgar por su encuadernación y los paratextos, pero, por razones desconocidas, el proceso fue paralizado antes de llegar a manos de los censores. A partir de su producción textual, podemos deducir que la autora participó en la escena literaria de su tiempo en certámenes y justas poéticas y estaba familiarizada con las principales corrientes estéticas de la época. De la variedad de ritmos y formas se infiere que tenía una profunda cultura literaria, probablemente de origen autodidacta. El hecho de pertenecer a una comunidad religiosa de renombre seguramente le facilitó a María de Santa Isabel la participación en los círculos de los literatos toledanos, y el mecenazgo de María de Ortega promocionó activamente su obra entre los círculos cortesanos de la ciudad. Se sabe que María mantuvo diálogo, a través de su poesía, con literatos y nobles de estos ambientes, tomando parte en la disputa acerca del valor intelectual de las mujeres e inscribiéndose en la larga tradición de las que participaron en la querelle des femmes. Asimismo, ella misma fue promotora de la producción literaria de otras autoras, como Juana de Bayllo y otras anónimas, cuyas composiciones incluye en su libro. A pesar de que muchas de sus composiciones versan sobre un desengaño amoroso, resulta forzado tomarlas como rastros autobiográficos. Su primer poema lo compuso a los veintisiete años: “Al evangelista San Joan”. El conjunto de sus poesías va precedido por un interesante prólogo al lector en el que María legitimó su autoría y expresó su deseo de ver publicado en un volumen sus composiciones.

OBRAS

Poesías

Ms/publicación

Manuscrito, siglo XVII

Año

1642-1646

Descripción

88 ff., 4º, manuscrito preparado para la publicación con el prólogo y versos laudatorios de P. Jacinto Quintero, Sor Juana de Bayllo, Licencia de Montoya y un religioso franciscano. El ejemplar está deteriorado, con pérdida de texto.

Localización

Madrid, BNE, Ms. 7469

Notas

Se conservan 138 composiciones poéticas de María de Santa Isabel. Incluyen poemas de carácter religioso y profano; entre los últimos, la mayor parte son de temática amorosa. Utilizó diversos metros y formas (sonetos, romances, liras, endechas, décimas, villancicos, octavas, glosas. Compuso, entre otros: versos de circunstancias (como Á la profesión de D.ª Petronila de la Palma, Á la muy venerable D. Beatriz de Silva, fundadora del Real de la Concepción de Toledo); burlescos (como ¡Oh! como intenta Leonida); composiciones para los certámenes poéticos (como Romance en el certamen del Evangelista San Joan, que se ymbentó en el convento de San Pablo para su fiesta de Mayo de 1642 años); a los santos (como Á San Bernardo, Á la Magdalena, Á Santa Catalina, Á Santa Teresa); villancicos de Navidad;  letrillas (como Al Santísimo Sacramento).

El manuscrito no llegó a publicarse.

Vida

Vida de la venerable madre María Bautista

Ms/publicación

Manuscrito, siglo XVII

Año

1644

Descripción

96 ff., 4º, en excelente estado de conservación

Localización

Toledo, archivo de las Comendadoras de Santiago, AMCS. 31

Notas

Martina Vinatea Recoba justifica la hipótesis sobre la autoría de este texto de la manera siguiente: “Nótese [en los dos manuscritos] el alargamiento de las letras ‘p’, ‘q’, ‘g’ y las similitudes generales en la escritura: las ‘d’, las ‘y’, las ‘s’ finales, el rasgo sobre la ‘i’ son del mismo tipo. Además se pueden observar otras similitudes en la letra misma que llevan a asegurar sin duda alguna que ambos escritos fueron trazados por una misma mano. Para subrayar esta certeza, señalamos también que tanto la amanuense del poemario como la de la Vida, tienen rasgos lingüísticos comunes como el ‘laísmo’ […]. Finalmente, el poema 94 de Marcia Belisarda, dedicado a la traslación de una imagen de la Virgen, se puede explicar con un acontecimiento ocurrido en el convento de las Comendadoras y que está consignado en el manuscrito de la Vida de María Bautista. […] A todo lo anterior, se debe agregar que, hasta donde han podido alcanzar mis investigaciones, no existen datos sobre la existencia de alguna religiosa llamada María de Santa Isabel entre las concepcionistas” (Vinatea Recoba, 2015: 59). Una versión muy abreviada de Vida y muerte de la Venerable María Bautista, religiosa del convento de Santa Fe de Toledo, murió año 1663 (h. 160-160v) se encuentra en un códice misceláneo de Papeles referentes a la canonización de la Infanta Sancha Alfonso, y al Monasterio de Santa Eufemia de Cozuelos fechado a 1757 (Madrid, BNE, Ms. 13064).

BIBLIOGRAFÍA

Fernández López, María (Marcia Belisarda) (2015), Obra poética completa, Martina Vinatea Recoba (ed.), New York: IDEA/IGAS.

Powell, Amanda (1993), “¡Oh qué diversas estamos,/ dulce prenda, vos y yo! Multiple Voicing in Love Poems to Women by Marcia Belisarda, Catalina Clara Ramírez de Guzmán, and Sor Violante del Cielo”, en: Julián Olivares y Elizabeth Boyce (eds.) (1993), Tras el espejo la musa escribe. Lírica femenina de los Siglos de Oro, Madrid: Siglo XXI, pp. 51-80.

Pérez de Guzmán y Gallo, Juan (1923), Bajo los Austrias. La mujer española en la Minerva literaria castellana, Madrid: Escuela Tipográfica Salesiana.

Serrano y Sanz, Manuel, (ed.) (1903-1905), Apuntes para una biblioteca de escritoras españolas desde el año 1401 a 1833, V. 2, Madrid: RAE, pp. 362-378.

Kaminsky, Any Katz (ed.) (1996), Flores del Agua. An Anthology of Spanish Women Writers from the Fifteenth to the Nineteenth Century, pp. 371-373.

Vinatea Recoba, Martina (2015), “Estudio introductorio” en: María Fernández López (Marcia Belisarda). Obra poética completa, New York: IDEA/IGAS, pp. 17-110.